Hallados nuevos fósiles de macaco en Marruecos

Adulto y cría de macaco de Berbería (Macaca sylvanus).  (Crédito: "Macaca sylvanus" de Ouwesok bajo licencia CC BY-NC 2.0) Adulto y cría de macaco de Berbería (Macaca sylvanus). (Crédito: "Macaca sylvanus" de Ouwesok bajo licencia CC BY-NC 2.0) Adulto y cría de macaco de Berbería (Macaca sylvanus). (Crédito: "Macaca sylvanus" de Ouwesok bajo licencia CC BY-NC 2.0)

Adulto y cría de macaco de Berbería (Macaca sylvanus).  (Crédito: "Macaca sylvanus" de Ouwesok bajo licencia CC BY-NC 2.0)

Una investigación publicada en Journal of Human Evolution liderada por personal investigador del Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICP), el Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES-CERCA) y la UniversitatRovira i Virgili describe seis dientes fósiles de macaco en el yacimiento de Guefaït, al noreste de Marruecos, de 2,5 millones de años de antigüedad. Su morfología es más parecida a la de la subespecie africana actual que a las formas fósiles de Europa, lo que aporta nuevas pistas sobre su dispersión en el pasado. La investigación también destaca la ausencia de teropitecos o geladas en Guefaït.

Los macacos (género Macaca) son un grupo de monos del Viejo Mundo (cercopitecoideos) de la tribu de los papioninos, que también incluye los mangabeys, los babuinos, los mandriles, y los teropitecos o geladas. Conjuntamente con los humanos, los macacos son los primates con una distribución más amplia en el mundo. Se conocen 23 especies actuales, distribuidas por África y Asia. En Europa, su presencia se limita a los anecdóticos macacos de Gibraltar, que son el resultado de introducciones por parte de los humanos de ejemplares del macaco de Berbería (Macaca sylvanus). Esta especie actualmente se encuentra de forma salvaje en el norte de África, a diferencia del resto de especies del género, que son asiáticas. En el pasado, sin embargo, gracias al registro fósil sabemos que esta especie llegó a estar distribuida, además del norte de África, por gran parte de Europa. En Cataluña, se han descrito restos con una antigüedad aproximada de un millón de años, procedentes de los yacimientos de Cal Guardiola y Vallparadís (Terrassa) y de Incarcal (Pla de l'Estany), entre otros. Se cree que todos los macacos fósiles de Europa desde el Plioceno inferior pertenecen a esta especie, salvo la especie insular extinta de Cerdeña (Macaca majori) y de los restos más antiguos del Mioceno terminal (hace poco más de 5 millones de años), que no se han atribuido a ninguna especie.

La presencia de macacos en el norte de África se remonta al Mioceno superior, con una antigüedad de unos 6-7 millones de años. Poco tiempo después, hace aproximadamente 5,5 millones de años, encontramos los primeros representantes en Europa (España e Italia), donde migraron durante la Crisis de Salinidad del Messiniense. Ahora, un artículo publicado en Journal of Human Evolution y liderado por personal investigador del Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICP), el Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES-CERCA), la Universitat Rovira i Virgili (URV), el Departamento de Geología (Facultad de Ciencias de la universidad Mohammed Premier de Oujda) y i el l’Institut National des Sciences d’Archéologie et du Patrimoine (INSAP), describe nuevos restos fósiles de macaco procedentes del yacimiento de Guefaït, en el noreste de Marruecos. En varias campañas de excavación llevadas a cabo durante 2018 y 2019, en el marco de un proyecto interdisciplinario de colaboración hispano-marroquí, se recuperaron más de 3.200 restos de vertebrados (anfibios, reptiles, y pequeños y grandes mamíferos, incluyendo elefantes, rinocerontes e hipopótamos, entre otros) del Pleistoceno inferior inicial, con una antigüedad cercana los 2,5 millones de años.

Entre los fósiles recuperados se incluyen seis dientes de cercopitécido que son objeto de la investigación ahora publicada. La morfología de los dientes ha permitido asignarlas al género Macaca. A partir del tamaño de los dientes, los investigadores estiman que estos macacos tenían un peso aproximado de 12 kilos. Tanto el tamaño como la morfología de los dientes son compatibles con los de la especie actual del norte de África (el macaco de Berbería, Macaca sylvanus), aunque la adscripción a esta especie es tentativa.

Imatge 2. Dues molars (d’esquerra a dreta, M2 i M3) de Macaca cf. sylvanus recuperades al jaciment de Guefaït (María D. Guillén/ IPHES)Imagen 2. Dos molares (de izquierda a derecha, M2 y M3) de Macaca cf. sylvanus recuperados en el yacimiento de Guefaït (María D. Guillén/ IPHES)

Durante el Pleistoceno, la cuenca de Aïn Beni Mathar–Guefaït era una zona montañosa y bastante seca, caracterizada por la presencia de bosques abiertos y algunas masas de agua cercanas. Las preferencias del actual macaco de Berbería ―que ocupa una gran diversidad de ambientes siempre y cuando haya disponibilidad de agua y presencia de árboles de árboles más o menos cerca― es consistente con las reconstrucciones del paleoambiente de esta zona.

Los datos moleculares indican que Macaca sylvanus divergió antes que el resto de macacos actuales (que encontramos en Asia). Los dientes de Guefaït son más parecidos a los de la subespecie africana actual que a las formas fósiles de Europa. Es posible que la especie estuviese presente de forma ininterrumpida durante los últimos 5 millones de años en África, pero curiosamente hay un vacío en el registro fósil entre 2,5 y 0,2 millones de años, que contrasta con el registro más continuo que se observa en Europa. Futuros estudios deberán aclarar si esta ausencia se debe a una extinción local de este a especie en África o si, simplemente, se trata de un problema de muestreo. La investigación también constata la ausencia de geladas en Guefaït, un género de primate que sí ha sido descrito en Ahl al Oughlam, otro yacimiento marroquí que tiene casi la misma edad. Su ausencia podría obedecer a un muestreo insuficiente, o indicar una edad ligeramente anterior para Guefaït (previa a la dispersión de los teropitecos hacia el norte de África).

El personal investigador que ha participado en el artículo incluye a David M. Alba (ICP), Antonio Rodríguez-Hidalgo (UCM-IPHES-IDEA), Hassan Aouraghe (Université Mohammed Premier de Oujda), M. Gema Chacón i Robert Sala-Ramos (IPHES-CERCA y Universitat Rovira i Virgili), y Jan van der Made (MCNM-CSIC), entre otros.

La investigación se ha llevado a cabo con el soporte del programa CERCA (Generalitat de Catalunya) y la Agencia Estatal de Investigación (Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades). El proyecto de investigación en Marruecos es posible gracias a la colaboración del gobierno de Jerada y las autoridades locales de Aïn Beni Mathar y Guefaït y está financiado por la Fundación Palarq, el Ministerio de Cultura y Deporte, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, el programa María de Maeztu, el Ministerio de Cultura y Patrimonio del Reino de Marruecos y ayudas para apoyar las actividades de los grupos de investigación (SGR) de la Generalitat de Catalunya, entre otros.

Imagen principal: Adulto y cría de macaco de Berbería (Macaca sylvanus). (Crédito: "Macaca sylvanus" de Ouwesok bajo licencia CC BY-NC 2.0 )

Artículo original: Alba, D. M., Rodríguez-Hidalgo, A., Aouraghe, H., van der Made, J., Oujaa, H., Saladié, P., Aissa, A. M., Marín, J., Farkouch, M., Lorenzo, C., Bengamra, S., Delson, E., Chacón, G., & Sala, R. 2021. New macaque fossil remains from Morocco. Journal of Human Evolution. DOI: 1016/j.jhevol.2021.102951

Last modified on Lunes, 22 Febrero 2021 10:37
Rate this item
(0 votes)

Patrons:

logo generalitat        logo uab

Awards:

Excellence in research

With the support of:

logo icrea    logo ue

CERCA Center:

logo cerca