En la actualidad, este archivo se encuentra en la biblioteca del ICP.
Su material documental es de gran valor porque recoge una actividad científica latente que dibuja el perfil de la historia de la ciencia contemporánea catalana y, particularmente, de las geociencias, encarnadas en la persona de Miquel Crusafont y de sus colegas del Instituto Provincial de Paleontología de Sabadell (IPPS), hoy Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont.
Los archivos, además, tiene un gran componente social, puesto que son el reflejo de varias épocas de la vida política catalana y española, de su repercusión en el entorno intelectual y personal de sus protagonistas y del fracaso o arraigo de instituciones como el IPPS.
Antes de iniciar el proceso de catalogación, el archivo Crusafont estaba conformado por más de un centenar de cajas que contenían documentos diferenciados cómo; documentos personales, profesionales, académicos, congresos, cursillos, conferencias, publicaciones, libros, casi seis mil fotografías, recortes de prensa, postales y, sobre todo, mucha correspondencia.
El legado epistolar
Precisamente, la correspondencia científica de Crusafont con otros científicos eminentes fue fundamental para el desarrollo de su tarea científica y constituye una prueba de su alcance internacional, pero también es una muestra del cariz personal que Crusafont supo mantener con algunos de estos científicos en cualquier parte del mundo.
Hoy, esta correspondencia constituye un material historiográfico muy importante por conocer el desarrollo de la paleontología y la geología catalana, pero también estatal, que tuvo lugar básicamente desde Sabadell y Barcelona.
Son muchos los científicos extranjeros con los que Crusafont mantuvo contacto.
Quizás el más importante fue el profesor norteamericano George Gaylord Simpson, el teórico neo-darwiniano más destacado de aquellos años. Crusafont llegó a tener con él una íntima amistad que posibilitó la venida de éste ilustre profesor a Sabadell, en 1960.
Pero, también están presentes en esta lista científicos y profesionales europeos, asiáticos, sudamericanos y obviamente catalanes residentes en el estado o fuera, bien por causas profesionales o debido a su exilio debido al franquismo.
Muchos de estos contactos fueron establecidos personalmente en los Cursillos Internacionales de Paleontología de Sabadell que Crusafont organizó entre 1952 y 1958 al Museo de Sabadell y que contaron con un gran prestigio.
Otra parte importante del archivo es el resultado del intercambio de información entre paleontólogos sobre los hallazgos que se iban produciendo. Este intercambio se llevaba a cabo mediante unas pequeñas publicaciones, a veces sólo de un par de hojas, conocidas vulgarmente como 'separatas'. El número de publicaciones de éste tipo escritas por Miquel Crusafont en el transcurso de su vida llega casi a quinientas.
La catalogación
El proyecto de catalogación del archivo se desarrolla desde el junio de 2005, mediante un convenio entre el Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont y la Universitat Autònoma de Barcelona (Proyecte SAC - Servicio de Archivos de Ciencia), para que el resultado constituya una herramienta que permita servir en préstamo los documentos y facilitar así el conocimiento y la encontrada de información que contienen. Es decir, difundirla y ofrecerla a los usuarios que la necesiten.
A principios de 2008 ya se habían abierto 8.500 fichas relativas a documentos personales catalogados, correspondientes a la correspondencia personal y profesional, dónde hay principalmente cartas, postales, recibos, facturas, telegramas, tarjetas de vista, notas e invitaciones.
Una parte importante de esta información se encuentra en la web del proyecto arxiusdeciencia.cat (www.sac.cat) del Centre d'Estudis d'Història de les Ciències de la Universitat Autònoma de Barcelona.