La nueva especie de dimílido ha sido bautizada como Plesiodimylus ilercavonicus en referencia al pueblo íbero de los ilercavones, que habitaron parte de las actuales provincias de Castelló y Tarragona. Los investigadores Marc Furió (ICP), Vicente D. Crespo y Francisco Javier Ruiz-Sanchez (Museu Valencià d'Historia Natural y Plini Montoya (Universitat de Valencia) firman el artículo que ha servido para describir la especie en la revista Historical Biology y que se suma a la lista de otros restos de hámster y otros roedores, murciélagos y insectívoros encontradas en Alcora (Castelló) de especies procedentes de Europa central, las cuales evidencian una etapa de intercambio faunístico entre la península ibérica y la Europa central durante el Mioceno inferior.

La presencia de dimílidos, en el contexto del resto de faunas identificadas en la zona, da algunas pistas sobre el paleoambiente de la zona hace 16 millones de años. La reconstrucción del paleoambiente sugiere un ecosistema similar a un bosque tropical, con áreas de prados que se situarían cerca de un gran lago que abarcaba gran parte de los actuales términos municipales de Alcora, Ribesalbes y Fanzara.

Los dimílidos son unos pequeños mamíferos insectívoros sin representantes actuales. Todo lo que se sabe de esta familia proviene del estudio de dientes y mandíbulas aisladas y de algunos fragmentos de cráneo. 'Dimylidae' (en latín) significa 'con dos molares', porque la pérdida de las últimas molares (lo que serían las muelas del juicio en los humanos) es uno de los rasgos más característicos del grupo. Además, sus dientes eran muy diferentes de las de otros insectívoros como los topos, los erizos y las musarañas. Los principales tubérculos eran anchos, con el esmalte grueso y redondeados en lugar de puntiagudos como la mayoría de insectívoros.

Lo que más llama la atención de los dientes de los dimílidos es que las otras molares eran muy grandes, hasta el punto que, en algunos casos, sobresalían por los bordes de la mandíbula. Algunos mamíferos actuales como las nutrias marinas presentan dientes similares, aunque nunca llegan a los extremos de algunos dimílidos y se considera que son adaptaciones para alimentarse de presas que tienen cáscaras duras, tales como almejas, caracoles o crustáceos. La dentadura masiva actúa como una especie de prensa hidráulica que permite aplastar las cáscaras y comerse el animal que se esconde en el interior.

Los dientes de dimílidos, como las de los roedores, tienen un tamaño muy pequeño y para obtenerlas hay que lavar y pasar los sedimentos extraídos de los yacimientos a través de varios tamices.

Imagen principal: De izquierda a derecha: M1 holotipos (MGUV-23387) y M1 paratipo (MGUV-25174) de Plesiodimylus ilercavonicus.

Artículo original: Vicente D. Crespo, Marc Furió, Francisco Javier Ruiz-Sánchez & Plini Montoya (2018) A new species of Plesiodimylus (Dimylidae, Eulipotyphla, Mammalia) from the Early Miocene of Spain, Historical Biology, 30:3, 360-371, DOI: 10.1080/08912963.2017.1289519